El Banco de Inglaterra acusa a la UE de poner en riesgo la estabilidad del mercado
Las autoridades británicas creen que "es necesaria una actuación a tiempo de las autoridades de la UE para mitigar los riesgos para la estabilidad financiera".
- T+
- T-
El comité de política financiera del Banco de Inglaterra ha advertido hoy de que las autoridades de la Unión Europea (UE) tienen que tomar medidas urgentes para evitar una grave distorsión de los mercados el 29 de marzo de 2019, fecha prevista para formalizar el Brexit.
Las autoridades británicas creen que "es necesaria una actuación a tiempo de las autoridades de la UE para mitigar los riesgos para la estabilidad financiera, particularmente los asociados con los contratos de derivados y la transferencia de datos personales".
El principal problema identificado por el organismo que dirige Mark Carney afecta a operaciones valoradas en 41 billones de libras (unos 46 billones de euros).Este es el importe nominal bruto de los contratos de derivados suscritos por entidades europeas que vencen más allá de marzo de 2019 y que prevén su liquidación en cámaras de contrapartida con sede en Reino Unido. Habitualmente, esos derivados son opciones que firman las empresas con bancos e inversores para cubrir el riesgo ante futuras variaciones de tipos de interés, divisas o materias primas. Esas cámaras garantizan que las partes ejecuten los contratos en su fecha de vencimiento.
Según el Banco de Inglaterra, mientras Reino Unido ha legislado para permitir que las firmas con sede en Reino Unido puedan seguir utilizando cámaras de contrapartida europeas tras el Brexit, Bruselas no ha hecho lo propio para que los inversores y empresas europeas puedan cerrar sus operaciones en cámaras británicas. "Bajo la legislación europea, tras marzo de 2019 los socios europeos estarán actuando de manera ilegal si acceden a los servicios de liquidación de contrapartes británicas. Si no actúan las autoridades de la UE, las reglas europeas crearán incertidumbre sobre si los miembros europeos de las cámaras británicas podrán cumplir con sus obligaciones. Para asegurar una operación segura de las cámaras y evitar riesgos para la estabilidad financiera, particularmente en caso de estrés, los contratos que los socios europeos tienen con las cámaras británicas tendrán que ser ejecutados, o transferidos, antes de marzo de 2019. Esto será costoso para las empresas europeas y podría constreñir la capacidad del mercado de derivados", señala el regulador.
Además, dice en su nota el comité, "la fragmentación de la liquidación elevará los costes para las empresas de la UE. Las estimaciones de la industria sugieren que por cada aumento de un punto básico en el coste de las opciones sobre tipos de interés, el impacto podría ser de 22.000 millones de euros por año para las compañías".
Todo este riesgo podría quedar limitado si Londres y Bruselas acuerdan un periodo transitorio tras el Brexit, hasta diciembre de 2020, en el que se podrán mantener las actuales relaciones financieras hasta que se negocien todos los detalles de la ruptura entre ambas partes.
Algunos políticos británicos creen que la UE está arrastrando los pies, a la hora de facilitar el futuro acceso desde el continente a la City de Londres, con el fin de incentivar la recolocación hacia ciudades como París y Fráncfort de negocios que ahora están en la capital británica.